Quiero iniciar este mensaje agradeciendo a Dios y a Santa María Virgen por la protección y guía que nos brindan desde hace 58 años, por permitir que durante este tiempo la visión de nuestro fundador el reverendo Padre, William Morris Christy, sea una realidad y la Universidad Católica de Santa María se consolide como una institución de servicio la cual hoyes parte de Arequipa y está comprometida con su desarrollo, gracias al liderazgo y al trabajo en equipo.
Una muestra de ello es la gestión que hoy dirijo junto a los vicerrectores con quienes hemos logrado transformar y modernizar en los últimos cinco años nuestra casa superior de estudios, haciendo frente a los retos y a los grandes cambios que se gestó en la educación superior en el país, tras la puesta en vigencia de la nueva Ley Universitaria.
En este periodo hemos realizado transformaciones estructurales como es la creación del Vicerrectorado de Investigación brindándole apoyo y presupuesto, producto de ello se logró en el 2018 financiar 14 proyectos de investigación. Mientras que en innovación y desarrollo hemos aportado fondos para desarrollar 24 proyectos nuevos.
Desde la casa santamariana se planteó un nuevo modelo de inversión, el establecer alianzas estratégicas, con la gobernanza través del Estado, uniendo a este esfuerzo al sector privado y la academia, a ello lo denominamos “la triple hélice”, este nuevo modelo nos permitió desarrollar 17 proyectos en el campo de las ciencias de la salud, ingenieras y de biotecnología. Financiados con fondos concursables externos.
Como parte del impulso a ser una universidad de investigación, el año pasado hemos logrado enviar 18 especialistas a 11 pasantías en cuatro países de Sudamérica, además de Europa y Estados Unidos, porque consideramos que el intercambio de experiencias y la internacionalización es una pieza fundamental en el modelo de formación en la educación superior en el siglo veintiuno, y porque vivimos en un mundo global.
ASEGURANDO LA CALIDAD EDUCATIVA
El físico Albert Einstein consideró, “La enseñanza debe ser de tal calidad, que pueda recibirse como el mejor regalo y no como una amarga obligación”. En este último año hemos logrado brindarles a nuestros 15 mil estudiantes de pregrado y 2 mil profesionales de nuestra escuela de Postgrado, un servicio que está acorde con los estándares que exige el mercado laboral competitivo, este fue reconocido por la comunidad internacional a través de la certificadora Bureau Veritas, la cual nos otorgó el ISO 9001 :2015, por el adecuado y satisfactorio sistema de gestión de calidad que desarrollamos, el cual comprende los procesos de enseñanza, aprendizaje e investigación, para nuestros 33 programas de estudio.
En diciembre del 2017 obtuvimos el Licenciamiento por parte de la Sunedu a través de la resolución N° 102-2017, donde se reconoce que el servicio educativo ofrecido por la casa Santamariana, cumple con las condiciones de calidad exigidas por la Ley Universitaria. Luego de este logro, nos propusimos nuevas metas en la gestión como fue el iniciar el proceso de acreditación de nuestras escuelas profesionales.
Con mucha alegría tengo que informar que hemos avanzado de forma positiva en este proceso, en este año logramos que las escuelas profesionales de Administración, Educación Inicial y Medicina, sean reconocidas por el Sistema Nacional de Evaluación, Acreditación y Certificación de la Calidad Educativa (Sineace), organismo técnico especializado, adscrito al Ministerio de Educación, el cual reconoció que en las aulas santamarianas se imparte una educación de calidad.
La acreditación convierte a los egresados de estas escuelas, en profesionales más competitivos, capaces de ser líderes en los equipos de trabajo que integran en el sector privado e instituciones públicas. Cuentan además, con una visión que les permitirá plantear y diseñar nuevos procesos de gestión para mejorar la producción de bienes y servicios de la organización que integren, elementos que los diferencian de profesionales egresados de otras universidades.
Hemos avanzado en el proceso de certificación internacional, logrando que los programas de ingenierías: Electrónica, Industrial, Mecánica-Eléctrica, Mecánica, Mecatrónica y Sistemas, que son parte de la Facultad de Ciencias e Ingenierías Físicas y Formales, logren la certificación emitida por la Comisión de Acreditación de Ingeniería de ABET.
Convirtiéndose en la primera facultad de su tipo en Arequipa y el sur del país, en contar con la Acreditación ABET. Ello permitirá que 3 mil estudiantes del área de ingeniería de nuestra universidad, tengan la opción de que su título profesional sea reconocido en 31 países del mundo y opten por desarrollar cursos de especialización en Estados Unidos.
Seguimos trabajando para que más escuelas profesionales también alcancen la excelencia académica, siendo el inicio de este proceso la Acreditación. A diciembre de este año se logrará la certificación por parte del Sineace de las escuelas de Enfermería, Obstetricia, Farmacia, Derecho, Ingeniería Civil, Ingeniería Comercial, Odontología y Medicina Veterinaria, todas ellas impartirán una formación basada en estándares internacionales de calidad.
No solo nos hemos preocupado por acreditar a nuestras escuelas profesionales, sino que nos hemos vuelto un centro de formación con respaldo de la empresa líder en informática en el mundo. Hoy la Universidad Católica de Santa María, cuenta con un Instituto de Informática, el cual es un centro de formación y evaluación de la multinacional Microsoft. Nuestros alumnos reciben enseñanza especializada basada en un método que utiliza clases interactivas, foros de desarrollo de conocimientos, así como exámenes de práctica virtuales para obtener un certificado de especialización que es reconocido en 148 países del mundo.
Para lograr que el nivel de conocimientos que reciben los estudiantes marianistas sea el mejor, la casa santamariana invirtió más de 120 mil dólares en la contratación de Certiport, certificadora internacional que además, nos permite acceder a una plataforma digital especializada, que es utilizada por los alumnos de nuestro instituto de informática.
TENDIENDO PUENTES CON EL MUNDO
El término, “internacionalización en casa”, fue acuñado en 1999 por el sueco, Bengt Nilsson, al enfrentarse con el hecho de que la reciente Universidad de Malmo, no contaba con una red internacional de trabajo que pudiera ofrecer a sus estudiantes una experiencia distinta a la tradicional, por tanto, consideró necesaria que primero había que prepararse para hacer frente a los retos de iniciar un proceso de movilidad de alumnos y docentes.
En base a esa experiencia una de las políticas que impulsamos durante nuestra gestión, es el promover la movilidad estudiantil a través de convenios de cooperación, para ello fortalecimos la Oficina de Cooperación y Relaciones Internacionales, con un equipo de gestión que tenga liderazgo y visión para establecer relaciones bilaterales con casas superiores en los cinco continentes. A la par, este equipo desarrolló un plan de acción para preparar a nuestros estudiantes, con el fin de que puedan acceder a becas y programas de intercambio donde deban desempeñarse de forma sobresaliente.
Este trabajo sostenido que se empezó hace un quinquenio ya comienza a dar frutos en nuestra universidad. Hoy contamos con más de 35 convenios con universidades de 16 países de Sudamérica, Estados Unidos, Europa y Asia.
En el 2018 recibimos 122 estudiantes extranjeros y enviamos a realizar estudios de pre y posgrado a 90 alumnos. En el semestre Impar del 2019 hemos recibido 74 estudiantes de Francia, México, Colombia, Argentina y Chile. Así como hemos enviado a estos países más de 40 estudiantes.
En agosto pasado encabecé la delegación de la Universidad Católica de Santa María, integrada por 37 estudiantes y docentes de las facultades de Farmacia y Bioquímica, Enfermería, Odontología y Medicina, quienes realizaron una pasantía en la Universidad Autónoma de Tlaxcala en México. A partir de esta experiencia, se firmó un convenio marco para trabajar en conjunto entre ambas casas superiores de estudios, proyectos de investigación que permitirán fortalecer la formación de nuestros estudiantes y volver más competitivos a nuestros docentes, y el próximo año vamos a duplicar la movilización de estudiantes y docentes con esta prestigiosa Universidad Mexicana.
Como presidente del Consejo de Rectores por la Integración de la Subregión Centro Oeste de Sudamérica (CRISCOS). He propuesto a los líderes de las 38 universidades que integran esta organización a nivel de cinco países de Sudamérica, establecer un fondo que promueva un sistema de becas para otorgar ayuda a aquellos jóvenes que deseen realizar estudios de postgrado y que no cuenten con recursos económicos suficientes, y se ha ampliado la movilidad estudiantil, docente y de trabajadores administrativo entre estas 38 Universidades.
Durante la Décimo Tercera Asamblea de Rectores de la Red Peruana de Universidades, realizada en las instalaciones de la Universidad Católica de Santa María en mayo pasado, apoyé e impulsé entre las autoridades de 18 casas superiores de estudios que integran esta organización, la iniciativa de establecer una plataforma digital que albergue un repositorio de más de 500 mil títulos, libros e investigaciones que aportarían las bibliotecas de cada una de las casas superiores en beneficio de los estudiantes de las universidades del Perú.
Considero que el conocimiento no es patrimonio exclusivo de unos cuantos. Como miembros de la comunidad universitaria, debemos promover una educación de calidad e inclusiva, para que más peruanos tengan acceso a ella. Siendo profesionales capacitados podrán aportar al desarrollo del país.
Es por eso que, en la Universidad Católica de Santa María, desde enero de este año se aplica seis escalas diferenciadas en el cobro de las tasas educativas, permitiendo que jóvenes de las provincias del interior de Arequipa y aquellos que estudiaron en colegios públicos, tengan acceso y sean parte de una institución que brinda una enseñanza de calidad con visión humanista.
ALIANZA ESTRATÉGICA CON EL GIGANTE ASIÁTICO
Gracias a la visión global que impulsamos, sentamos las bases para ser aliados estratégicos del gobierno de la República Popular China, esta decisión permitió que la Universidad Católica de Santa María, sea la sede del Instituto Confucio en el sur del Perú, reconocida como institución oficial, que promueve el chino mandarín y la cultura del gigante asiático, por el Ministerio de Educación de la República Popular China.
En doce años, hemos logrado que 5 mil arequipeños hablen y escriban el chino mandarín. 200 personas viajaron al país asiático con todos los gastos pagados por la República Popular China, como parte de los campamentos de verano que organiza el Instituto Confucio para conocer más sobre la cultura de esa nación. 80 arequipeños lograron una beca para realizar estudios de postgrado en universidades de China.
El año pasado mil 129 estudiantes se inscribieron en el Instituto Confucio para aprender el chino Mandarín. Como universidad somos parte de Arequipa y promovemos su desarrollo. Por ello hemos abierto las puertas para que nuestros ciudadanos conozcan y se integren a la segunda economía más importante del mundo.
En junio pasado hemos firmado un convenio de cooperación académica con la Universidad de Finanzas de Guangdong, para establecer relaciones interinstitucionales, con el fin de facilitar el intercambio de estudiantes como pasantes y así puedan realizar estudios de pre y postgrado, además de prácticas profesionales en las empresas más importantes del gigante asiático.
Estoy convencido que la nueva educación superior universitaria debe tener como uno de sus pilares la internacionalización. Porque nos permite establecer alianzas estratégicas, abrir las puertas hacia el mundo globalizado y nuevas culturas. La academia se debe nutrir de estos elementos para desarrollar ciencia y tecnología a través de la investigación.
CONSTRUYENDO EL FUTURO
Cuando iniciamos la gestión nos propusimos cerrar la brecha de infraestructura y recuperar el patrimonio de nuestra universidad, estas dos medidas eran imprescindibles si queríamos mantenernos en el mercado y plantearnos un plan de desarrollo sostenible. En el último año hemos logrado adquirir un local de 6 mil metros cuadrados en la calle Cayetano Arenas en el Parque Industrial, por un valor de 14 millones de soles, 25 % menos del costo inicial por el que se ofertaba la propiedad, ello se logró gracias al eficiente trabajo de la comisión negociadora.
En este terreno se establecerá nuestro Centro de Investigación e Innovación Tecnológica que contará con modernos laboratorios y talleres donde nuestros investigadores, docentes y estudiantes puedan realizar sus actividades de la mejor manera.
En diciembre pasado inauguramos el puente que permite el acceso al fundo Huasacache, esta infraestructura posibilitó que este local funcione los 12 meses del año y no quede aislado en la época de lluvias por el ingreso de las aguas del río Socabaya. Además, el local del fundo fue mejorado y modernizado, asegurando que la facultad de Ciencias e Ingenierías Biológicas y Químicas, funcione en este espacio sin ningún contratiempo.
Hemos recuperado y saneado un terreno ubicado en el sector de Ciudad de Dios en el distrito de Yura, el cual estuvo abandonado por dos décadas. En este espacio construimos el Almacén General de la Universidad Católica de Santa María, donde además, se guardan los archivos de todas las unidades academias y administrativas en ambiente seguro y adecuado.